jueves, 25 de marzo de 2010

POTENCIA SONORA DE LA DANZA

Bare Soundz - Savion Glover


Tercera llamada. De  andar y vestir relajados,  aparecen Savion Glover y los hoffers Marshall Davies Jr. Y Maurice Chestnut. Los bailarines sonrientes, toman posición en las tarimas. A partir de este momento  ya nada será igual: olviden toda idea anterior sobre el tap, incorporen la posibilidad que una evento de danza sea a la vez un concierto lleno de potentes y múltiples bombas rítmicas generadas por 3 locos que tienen una capacidad de improvisación digna de la mejor escuela de jazz y por si esto  fuera poco, la virtud  de evocar con los pies instrumentos como el bajo, tambores, guitarras e incluso un banjo. Señoras y señores: Esto es Bare Soundz, un recorrido rítmico y melódico que irá al blues, jazz, drum and bass, África y el Caribe, sin más instrumentos que 6 pies y algunas palmadas en un escenario escueto compuesto por tres tarimas, con micrófonos colocados a piso, 3 bocinas en pedestal y 3 monitores.  Toda una noche para dejarse llevar por la potencia sonora de la danza.
En este “concierto dancístico” Savion Glover establece un desafío a sí mismo y a sus compañeros: como en un ensamble de jazz, propone una base de notas con los pies, riffs a velocidades vertiginosas y con cambios inesperados de tempos: todo un rompecabezas. Davies Jr. y Chestnut con la complicidad que conllevan años de colaboración, observan atentos a su líder, descifran, intercambian miradas y sonrisas mientras acompañan  al maestro dando las notas bajas, los contratiempos, para luego dar pie a improvisaciones que dejan ver las personalidades de cada uno de sus integrantes: Chestnut es discreto y  fuerte, Davis Jr. es brillante y ligero y Glover es el carismático, el niño y sabio a la vez.


Pero no todo gira en torno a Savion, quien con humildad, sabe darle su lugar a sus acompañantes, y es así como  en la primera parte del espectáculo, Marshall Davies Jr. entra en una dimensión sensorial que sólo la kinesis de sus pies es capaz de provocar y emprende un viaje solitario  por la métrica, África, Harlem, beats electrónicos… está casi en trance, y la audiencia con él. Expresiones de cansancio, éxtasis, énfasis, salen de su boca y poco a poco el público le grita conmovido, le aplaude y paulatinamente Marshall regresa a este mundo; Chestnut sonríe satisfecho de su compañero y lo acompaña, junto con Glover, al final de la travesía.
Dos highlights de la noche, se dan cuando los 3 bailarines presentan la pieza Trading spaces en una sola tarima, cada bailarín irá sustituyendo al otro, sin cortar la propuesta dancística. Este juego de niños se irá complejizando hasta desembocar en un unísono que manifiesta un poder tribal, es casi un statement, es breve pero impactante. A estas alturas, el público ya está hipnotizado.
Después de una gran travesía auditiva, rítmica y kinética, llega el otro highlight de la noche: Gigantic Steps pieza llamada así en referencia a Giant Steps de John Coltrane a quien dedica este número, en donde como un homenaje al gran saxofonista, Savion propone una intrincada expedición hacia la improvisación, generando nuevos colores en el sonido, y “dando pie” al solo más largo de la noche. Maurice y Marshall seguros y elegantes están ahí para él. Es el momento del maestro: El artista “toma la palabra” scratchea, desliza, rebota, cambia de velocidades, de peso, se voltea a un frente, luego a otro, agita sus brazos, salta, suspira, el ritmo lo rebasa, grita ¡aaaaah! Y todos se incorporan y caen en el tiempo preciso y la pieza vuelve a su base melódica, satisfechos de haber cumplido cabalmente, terminan.


El “concierto dancístico” llega a su fin. El público de pié, ovaciona el virtuosismo de estos tres bailarines, que han hecho alarde durante la noche de generosidad y humildad, una noche  que nos recuerda el poder de la danza, sin más adornos que el cuerpo mismo.  No, no fue una de esas noches de tap de sombrero de copa, este es el tap de Savion Glover, el del siglo XXI. El desafío está ahí: que nuestros oídos alcancen sus pies, pero hay otro desafío más: el sentir en todititito el cuerpo, el placer de estar vivo. ¿Nos acompañan?
Savion estará aún los días 25 y 26 de marzo a las 20:30 hrs. En el Teatro de la Ciudad.


Mariana Arteaga





25 y 26 de marzo, 20:30 hs. Teatro de la Ciudad 

fmx – Festival de México 2010 

¡Déjate transformar!